lunes, 1 de junio de 2009
Como en casita
Amiga,
Pasamos el fin de semana sorprendidos y animados, porque descubrimos que sí hay playas azules y olorosas a mar muy cerca de Edimburgo. La que ves en la foto está al Este de la ciudad, a unos treinta minutos en tren desde el centro -a un poco más de una hora de la casa.
El pueblito se llama North Berwick. Tiene un centro de observación de aves y esta playa inmensa y solitaria -por ahora- donde pasamos el día descansando y asombrados del clima extraordinario que estaba haciendo. Por un rato largo, bajo el sol, frente al mar azul, escuchando las gaviotas, me sentí como en casa. Sólo la brisa fría que estaba soplando del este nos recordó que estábamos lejísimo... y el agua helada!
De ahora en adelante tengo que tragarme mis palabras y dejar de decir que el mar del norte es gris o marrón. Porque aquí está la prueba de que -a veces- puede ser de un espléndido azul intenso.
Cariños muchos,
r
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